Hoy a las 19 en el marco del ciclo Los martes del libro organizado por el Departamento de Ediciones del CCC y Desde la Gente, se presenta la publicación Perder la cabeza, amores que la historia no perdonó de Marcos Rosenzvaig. El evento se llevará a cabo en el Centro Cultural de la Cooperación (Corrientes 1543 / sala Osvaldo Pugliese). Los panelistas serán Raul García Luna, Carlos Aldazábal, José Grabivker y Jorge Testero. Ascender la escalera de pasiones siempre implica la posibilidad de perder la cabeza. La novela narra en contrapunto dos historias paralelas. Por un lado la cabeza de Marco Avellaneda colgada de un árbol de la plaza de Tucumán, enmarcada en la sangrienta epopeya entre Unitarios y Federales. Por otro lado la de Pablo, un militante tucumano en los años 70´, símbolo de una generación hoy humillada en cada uno de los desaparecidos. Ambos relatos se van trenzando y no evaden el amor como dimensión esencial de la tragedia.
martes, 23 de marzo de 2010
AMORES QUE LA HISTORIA NO PERDONÓ
Hoy a las 19 en el marco del ciclo Los martes del libro organizado por el Departamento de Ediciones del CCC y Desde la Gente, se presenta la publicación Perder la cabeza, amores que la historia no perdonó de Marcos Rosenzvaig. El evento se llevará a cabo en el Centro Cultural de la Cooperación (Corrientes 1543 / sala Osvaldo Pugliese). Los panelistas serán Raul García Luna, Carlos Aldazábal, José Grabivker y Jorge Testero. Ascender la escalera de pasiones siempre implica la posibilidad de perder la cabeza. La novela narra en contrapunto dos historias paralelas. Por un lado la cabeza de Marco Avellaneda colgada de un árbol de la plaza de Tucumán, enmarcada en la sangrienta epopeya entre Unitarios y Federales. Por otro lado la de Pablo, un militante tucumano en los años 70´, símbolo de una generación hoy humillada en cada uno de los desaparecidos. Ambos relatos se van trenzando y no evaden el amor como dimensión esencial de la tragedia.
Me gusta salir, andar en taxi, ir a restoranes, a los shopping cuando necesito ropa únicamente. En un tiempo era fanática de San Telmo y poco a poco me empezó a gustar más Palermo Viejo y, de vez en cuando, Hollywood. Antes regateaba bastante en las entradas a los espectáculos o me colaba en los recitales. Ahora directamente voy a los eventos con entrada libre y gratuita. Los invito a aventurarse por ese terreno.
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